La Liga Argentina también quiere imponer el fair play financiero

Luego de lo ocurrido con Leo Messi y su no continuidad en el Barcelona para luego emigrar a Francia y firmar para el PSG, el fair play financiero está de moda, pero en Argentina con otros números, también es una terminología que quiere marcar tendencia y lo pondría en práctica a partir de este semestre.

Desde mediados del año pasado, cuando se creó el nuevo ente que regula la Primera División, el control financiero sobre las gestiones económicas de los clubes aparece como uno de los puntos importantes del reglamento, aunque en varios puntos aclara que comenzaría siendo paulatino, con el objetivo de recabar información en su etapa inicial y con muchas salvedades a causa de la pandemia.

La idea es que de acá a fin de año se inicie una especie de control salarial sobre el pago de sueldos y primas de los planteles de todos los equipos, con un plazo máximo de 45 días. Incluso está previsto que puedan establecerse sanciones, ya sea económicas (multas) o deportivas (quita de puntos) en caso de incumplimiento.

Eso sí, todo se profundizaría a partir de 2022, donde comenzaría a tener implicancia un formato “360” tal como la denominan en las oficinas de Puerto Madero. Algo más parecido a lo que ocurre en Europa, con análisis económicos y financieros más profundos, evaluación de balances, controles preventivos y hasta limitaciones a la hora de salir al mercado de pases. Todo bajó un régimen de sanciones más duras…

Un plan similar ya estuvo sobre la mesa en tiempos de Superliga, pero nunca terminó de ejecutarse realmente y hasta hubo sanciones que luego fueron perdonadas. Ahora, por lo bajo, son varios los directivos que argumentan que es necesaria su aplicación con firmeza para ejecutar dicho control en el fútbol argentino.